Colombia: Sin pruebas, pero sin dudas – por Luis Guillermo Vélez
No tengo dudas que la elección de Petro fue monstruosamente fraudulenta, como la de Santos en 2014. Dos elecciones fraudulentas en ocho años es demasiado. A nadie le pareció llamativo que los 1.240.063 votos adicionales de segunda vuelta no se distribuyeran de manera más o menos uniforme entre todos los departamentos.